Correlación genotipo-fenotipo de la enfermedad celíaca y gradación del riesgo en niños españoles

  1. Martínez-Ojínaga Nodal, Eva
Dirigida por:
  1. Isabel Polanco Allué Director/a
  2. M. Concepcion Nuñez Pardo de Vera Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 29 de junio de 2017

Tribunal:
  1. Jesús Argente Oliver Presidente/a
  2. M. Molina Arias Secretario/a
  3. Alfonso Cañete Díaz Vocal
  4. Juan José Díaz Martín Vocal
  5. Eduardo Arranz Sanz Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 489285 DIALNET

Resumen

La enfermedad celíaca (EC) es una enfermedad de carácter inmunológico y afectación multisistémica en la que existe un factor desencadenante externo, el gluten, pero que solo tiene lugar en individuos con predisposición genética. Sin la presencia de los heterodímeros HLA-DQ2 y/o DQ8, el gluten no desencadena la respuesta inmunológica necesaria para el desarrollo de la enfermedad. Nuestro objetivo consistió en analizar y estratificar el riesgo en niños españoles en función de la genética HLA e investigar su relación con las variables demográficas, clínicas, serológicas e histológicas de la enfermedad. Hemos realizado dos estudios complementarios. En primer lugar un estudio observacional retrospectivo caso-control en una muestra de 475 pacientes celíacos y 628 controles para calcular el riesgo a padecer EC en función de los diferentes genotipos HLA-DQ en la Comunidad Autónoma de Madrid, y realizar una gradación del mismo. Posteriormente analizamos las variables demográficas, clínicas, serológicas e histológicas de los pacientes celíacos, intentando investigar la influencia del HLA en todas ellas mediante tablas de contingencia y pruebas de significación estadística y mediante regresión logística. Tras analizar los resultados concluimos que la mayor predisposición genética para desarrollar EC en población pediátrica española viene determinada por los alelos que codifican el heterodímero HLA-DQ2.5, seguida de la conferida por los haplotipos HLA-DQ8 y HLA-DQ2.2, los cuales implican un riesgo similar y menor. Es destacable que la presencia del haplotipo HLA-DQ7.5 en ausencia de otros haplotipos HLA de riesgo, si bien hace muy improbable el desarrollo de EC, no puede emplearse para descartar su diagnóstico cuando existen otros indicios de la enfermedad. Observamos que los niños con la genética HLA de máximo riesgo, determinada por la doble dosis del alelo HLA-DQB1*02 en portadores del haplotipo HLA-DQ2.5, presentan mayor riesgo de desarrollar anticuerpos dirigidos frente al enzima transglutaminasa tipo 2 (antitransglutaminasa tipo 2 o antiendomisio), con un efecto que depende de la edad, y además observamos como la presencia de la genética HLA de máximo riesgo aumenta la también tienen mayor probabilidad de presentar las lesiones histológicas más graves (Marsh 3b y Marsh 3c), con un efecto que se ve afectado por el sexo. Además, la homozigosis de los haplotipos HLA-DQ2.5 y DQ8 parece que aumenta el riesgo de desarrollar EC en niños con antecedentes de familiaridad en primer grado. Estas conclusiones son relevantes para la práctica clínica, sobre todo en niños con antecedentes familiares, donde serían de utilidad para poder sugerir la periodicidad de las determinaciones serológicas